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miércoles, 28 de diciembre de 2011

Prensa 28 diciembre

Los españoles son los europeos que menos desean trabajar más allá de la edad de jubilación


La edad de jubilación sigue siendo una decisión controvertida no sólo en España sino también en el resto de Europa, donde tampoco existe una unanimidad al respecto. Cuatro meses después de que el Congreso de los Diputados aprobase la Ley de Modernización del Sistema de la Seguridad Social, un 31% de los españoles espera seguir trabajando más allá de los 67 años, la edad legal fijada, según una encuesta que ha realizado Randstad entre profesionales de la Unión Europea.

Pese a que uno de cada tres trabajadores espera alargar su edad de retiro, se trata de una de las cifras más bajas de Europa. Los españoles son los ciudadanos de Europa que en menor proporción se decantan por seguir trabajando más allá de su edad legal de jubilación, sólo superados por los suizos (30%) y diez puntos porcentuales por debajo de la media europea (41%). Tras ellos se sitúan suecos (32%), belgas (32%), alemanes (38%) y franceses (39%).

En el lado contrario, griegos (62%), daneses (55%) e italianos (49%) son los ciudadanos comunitarios que más interés demuestran a la hora de retrasar su edad de jubilación más allá de la edad legal. El sondeo internacional que ha elaborado Randstad destaca la presencia de Grecia e Italia como dos de los países cuyos trabajadores son más proclives a posponer su retiro laboral, dato que coincide con los ajustes económicos que se han realizado durante los últimos meses en ambos estados y que penalizan, entre otras cuestiones, las prejubilaciones.

Alargar la edad de retiro es algo aceptado e incluso valorado por los empleados, ya que hasta un 27% de consultados expresa que sería feliz si pudiera continuar trabajando hasta los 67 años. Esto denota que en muchos casos los trabajadores abandonan el mercado laboral no tanto por decisión propia, sino por elección de sus propias compañías.De hecho, las prejubilaciones siguen siendo una realidad en nuestro país. Hasta un 51% de consultados por Randstad cree que tendrá que salir del mercado laboral antes de la edad legal de jubilación, lo que contrasta con las necesidades de nuestro sistema de Seguridad Social.

Esta opción es común entre los europeos y es mayor entre aquellos que presentan mejores condiciones económicas. Un 51% de suizos, un 46% de alemanes, un 41% de belgas, un 36% de suecos y un 33% de ingleses espera prejubilarse.

En España no se conoce con exactitud el número de prejubilaciones anuales, aunque esta figura supone un problema para el Gobierno, puesto que no sólo se pierden las cotizaciones de estos trabajadores sino que el sistema debe de abonar sus gastos por desempleo. Sin embargo, reducir su número parece una prioridad, tanto a nivel nacional como internacional, como así lo ha reconocido este año la Comisión Europea e incluso el actual presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, cuando anunció en su discurso de investidura la intención del nuevo Ejecutivo de mantener la edad de jubilación en los 67 años, suprimir las prejubilaciones y todo aquello que induzca al fraude de los retiros anticipados a costa de la prestación por desempleo



Báñez: un pacto entre CEOE y sindicatos facilitaría la reforma


La ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, se ha mostrado convencida de que la patronal y los sindicatos llegarán a un acuerdo que facilitará al Gobierno la tarea de reformar el mercado laboral.

"El acuerdo entre los agentes sociales nos hará la tarea más fácil", ha dicho la ministra en conversación informal con los periodistas tras la apertura solemne de la legislatura en el Congreso.

En este sentido, ha señalado que siempre será mejor un acuerdo, aunque parcial, entre patronal y sindicatos, que una reforma por decreto.

Ha explicado que en las conversaciones telefónicas que ha mantenido con la patronal y los sindicatos desde que tomó posesión del cargo ha constatado que existe "disponibilidad y ganas de buscar acuerdos por el bien de España".

Esta tarde a las 17:00 horas, Báñez irá personalmente a la sede de la CEOE para que el presidente de la patronal, Juan Rosell, le cuente los avances alcanzados en las negociaciones, en tanto que mañana hará lo mismo con los secretarios generales de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, y de UGT, Cándido Méndez.

Ha recordado que el presidente, Mariano Rajoy, les ha dado hasta el 7 enero para que le presenten los acuerdos logrados, ya que el plazo que se ha fijado para presentar al Parlamento una reforma laboral es el primer trimestre del año.

"Primero buscamos el consenso de los agentes sociales para después buscar el consenso parlamentario", ha añadido.

Preguntada por la actualización del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) que debería aprobarse en el Consejo de Ministros de este viernes, ha dicho que aún no hay una decisión tomada sobre su eventual subida desde los 641,4 euros mensuales establecidos para 2011.



Cómo pagar bien sin subida de sueldo


Cuatro años sin incremento salarial pesan mucho, pero se pueden hacer otras cosas si quiere entusiasmar a su plantilla: pagar mejor no es un tópico, es una realidad al alcance de muchos. Sólo hace falta un poco de empeño e imaginación.

Aumentar la productividad –la relación que existe entre la producción y los recursos utilizados- es uno de los retos del próximo año y, lograr este objetivo depende en buena parte de cómo se retribuye al profesional. José Ignacio Arraiz, socio director de Hay Group, afirma que “hay que pasar a la acción y no echar la culpa a la situación económica. La crisis no es una excusa permanente en materia de retribución”. Además añade que “para aumentar la competitividad hay que retener a los mejores y para conseguirlo, la retribución es clave”.

Los mejores ganan más

Pagar mejor al que más aporta es la regla de oro de las organizaciones que, cada vez, evalúan con más detalle el trabajo de sus empleados. Este es el principio para medir la productividad e incentivar realmente a los que más producen. La bolsa de la que disponen las organizaciones para premiar a los mejores es más reducida que hace cuatro años; por esta razón, miran con lupa a quién y cómo retribuyen.

Utilizar la retribución variable (porcentaje del sueldo fijo que se paga por el cumplimiento de objetivos) como herramienta de comunicación para incentivar al mejor talento ha sido la mejor opción para muchas organizaciones. Pero con eso no es suficiente. Según el último estudio de Hay Group, "los incrementos salariales ofrecidos a los empleados, con una perspectiva de continuidad en sus puestos de trabajo, siguen siendo reducidos".

¿Qué han hecho las empresas?

Para hacer frente a esta situación y no mermar el compromiso de sus empleados, el 27% de las empresas ha optado por congelar la retribución fija; el 38% ha llevado los incrementos al variable, pero sorprende que sólo el 45% de las organizaciones vincule el variable a los resultados. Según este estudio de Hay Group, en 2011 un 21% de las compañías ha optado por la retribución flexible, un 5% más que el año anterior. Una tendencia que seguirá calando en las empresas ante la previsible subida de impuestos que nos traerá 2012.

Arraiz reconoce que el problema de fondo en este panorama "es que no hay correlación entre las retribución sectorial ni los resultados". Sin duda, si existe un momento para la retribución variable es este. Pero para ello hay que superar esta brecha. Por ejemplo, sólo el 50% de los españoles considera que los objetivos que le marca la organización suponen un desafío importante, frente al 66% de los empleados de Suiza, Holanda e Inglaterra, referencia en esta práctica retributiva.

Otro de los datos más impactantes está relacionado con la actitud. Los datos de Hay Group revelan que el 80% de los profesionales españoles no dedica ni un 10% del tiempo a gestionar los desempeños bajos, en su opinión no merece la pena. Este elevado porcentaje contrasta con el 40% que se maneja en los países de referencia citados.

Pistas para afinar la retribución

Los pasos que propone Arraiz, para que la retribución sea responsable se establecen en torno a cuatro ejes: suficiente, considerando el mensaje; equilibrada, considerando riesgos; sostenible, considerando la estrategia; y gestionada, considerando la cultura.

Suficiente

1) Debe mirar al mercado para no quedar descolgada

2) Debe practicarse sin obsesiones, considerando la oferta global de empleo

3) Pasa por considerar a las personas que realmente se necesitan en la organización

4) Tiene que ser realista con la rotación no deseada

Equilibrada

1) Fijo/variable

2) Corto plazo/largo plazo

3) Las variables que influyen en la retribución

4) Beneficios y riesgos

Sostenible

1) IPC/ productividad

2) Equidad interna

3) Alineamiento entre la estrategia de la empresa, los resultados y la retribución

Gestión

1) Comunicar y explicar las decisiones retributivas

2) Poner en valor cada euro de la masa salarial (composición de la retribución flexible)

3) Gestionar expectativas



La cesta de la compra se encarece el doble que los salarios con el euro


Si usted tiene la sensación de que le cuesta mucho más llenar el carrito de la compra que cuando lo pagaba en pesetas, sepa que hay datos estadísticos que le respaldan, incluso si tiene la fortuna de no ser uno de los tres millones de nuevos parados de los últimos tres años.

Según un estudio publicado hoy por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), las familias españolas gastaban en 2001 una media anual de 765.000 pesetas (unos 4.600 euros) en el supermercado, frente a los 6.800 gastados en la actualidad. Eso supone un encarecimiento medio del 48%, si bien es cierto que parte del mismo se debe al alza impositiva sufrida por las bebidas alcohólicas: los datos del INE llevan al 80% la subida de precios del alcohol y el tabaco desde la introducción del euro, el 1 de enero de 2002.

Sesgos aparte, Estadística señala también un nada desdeñable incremento del 31,3% de los alimentos y las bebidas no alcohólicas en el último decenio. La comparación con la evolución de los salarios es forzosa. Los últimos datos de la Encuesta de Estructura Salarial, elaborada también por le INE, sitúan la media de 2009 en 22.511 euros, frente a los 19.802 de 2002. Así, la subida en ocho años fue del 13,7%. Si a ello se suman las alzas pactadas en convenio en 2010 y 2011, podemos estimar que el avance salarial en la década del euro rondaría el 16%. Prácticamente, la mitad de lo que se han encarecido los alimentos.

Pero la pérdida de capacidad de compra no se ciñe al supermercado. El encarecimiento medio desde 2002 supera el 40% en el transporte, la hostelería y la enseñanza, y también supera la mejora salarial en vestido y calzado (26,2%) y menaje (20,5%).

Los únicos capítulos que ese han abaratado desde su denominación en pesetas son el ocio y la cultura (-1,1%), la medicina (-0,7%) y, sobre todo, las comunicaciones (-11,9%). En este último, pesa la drástica mejora de la relación calidad-precio en la tecnología de consumo, como demuestra el abaratamiento de los televisores (62%) y las cámaras de fotos (72%).



Más de 600.000 empleados públicos superan los 55 años de edad


El Ejecutivo presidido por Mariano Rajoy trabaja a marchas forzadas para tratar de rebajar el coste que representa el sector público. En el tercer trimestre había 3,2 millones de funcionarios, de los que medio millón pertenecen a la Administración General del Estado. El pago de sus salarios supone un gasto anual de 27.000 millones de euros, a lo que habría que añadir el coste de los empleados públicos autonómicos y locales.

Para reducir el impacto que esa factura tiene en las cuentas públicas existen varias alternativas: rebaja de salarios, congelación o reducción de la oferta de empleo público o de la tasa de reposición. El sueldo de los empleados públicos bajó de media un 5% durante 2010 y se ha mantenido congelado durante este año. Este viernes, el Ejecutivo dará a conocer su decisión respecto a lo que sucederá el año que viene, aunque todo apunta a que permanecerán congelados. De este modo, la vía salarial no supondrá ningún ahorro. Este vendrá, aunque muy limitado, a través de la congelación de la oferta pública de empleo y de la supresión de la tasa de reposición, que tan solo se mantendrá para determinados colectivos, como Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

Un ahorro sustancial podría obtenerse del gran número de funcionarios que se van a jubilar en los próximos años y cuyas plazas no van a ser cubiertas. Según los últimos datos de la Encuesta de Población Activa, correspondientes al tercer trimestre, hay más de 600.000 funcionarios cuya edad supera los 55 años. De ellos, una tercera parte (214.000) se encuentra en la franja de edad entre 60 y 64 años, por lo que la mayoría se jubilará en los próximos tres años. Si a esa cifra se le une los 100.000 funcionarios de clases pasivas con edades entre 50 y 59 años (estos se pueden prejubilar a los 60), el número de empleados que abandonará la función pública se eleva a 315.000. Si la tasa de reposición finalmente se mantiene prácticamente congelada y solo se cubren algunas plazas consideradas imprescindibles, el sector público perderá cerca de 300.000 efectivos en los próximos tres años, lo que supone casi el 10% del total.

Esa cifra podría ser aún mayor si finalmente se desarrolla el reglamento, incluido dentro de la reforma de las pensiones, para facilitar la prejubilación a los dos millones de funcionarios del régimen general. En la actualidad, tan solo pueden optar a la prejubilación las clases pasivas (maestros, policías, médicos y cuerpos generales de la Administración General del Estado), que pueden retirarse con 60 años, siempre y cuando hayan cotizado más de 35 años. El resto de empleados públicos del régimen general no pueden prejubilarse por ahora. Lo podrán hacer una vez que se desarrolle el reglamento incluido en la reforma de las pensiones. En el mismo se establece la posibilidad de abandonar la actividad laboral con un mínimo de 37,5 años de carrera de cotización y una penalización del 8% por cada año que se retire con anterioridad a los 65 años. Esta merma, sin embargo, hace pensar que pocos funcionarios optarán por esta vía para jubilarse de forma anticipada.

Fuentes cercanas al Ejecutivo no descartan poner en marcha una plan de prejubilaciones incentivadas en el sector público, tal y como intentó en 2005 el ministro socialista de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, con el fin de tratar de adelgazar la administración pública. Ese plan se planteó en la Mesa de la Función Pública, en la que están representados las distintas administraciones y los representantes de los trabajadores, pero no salió adelante por las profundas discrepancias con el entonces titular de Trabajo, Jesús Caldera. La propuesta consistía en incentivar la salida de hasta 25.000 funcionarios de la Administración General del Estado, con edades comprendidas entre 58 y 64 años. El principal objetivo era ahorrar el coste de la masa salarial de esos trabajadores, con largas carreras de cotización y elevados emolumentos.

Caldera se opuso al considerar muy elevado el coste del plan para el erario público (lo cifró en 3.500 millones de euros) y porque se trasladaba un mensaje contrario al que se estaba reclamando desde la UE, partidaria de incentivar la prolongación de la vida laboral con el fin de hacer sostenible el pago de las pensiones.

Sevilla rechazó los cálculos elaborados por los técnicos de Trabajo y aseguró que el coste sería mucho menor, puesto que, en el caso de la Administración General del Estado, solo afectaría a las clases pasivas, cuya pensión no se paga con cargo a la Seguridad Social. El principal desembolso se realizaría en el caso de los empleados públicos ligados a comunidades autónomas y ayuntamientos, en los que más de la mitad eran de clases pasivas y el resto era del régimen general, cuya indemnización debía ser financiada por todos los contribuyentes.



La jubilación anticipada en la función pública

¿Quién puede optar por la jubilación anticipada dentro de la Administración pública?

Esta opción solo está contemplada para los funcionarios de clases pasivas, que pueden prejubilarse a partir de los 60 años, siempre que hayan acumulado 35 años de servicio. En este régimen están incluidos las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, los funcionarios ligados a la enseñanza, los médicos y los cuerpos generales (aquellos que realizan funciones comunes en el ejercicio de una actividad administrativa). En total, suponen cerca de un millón de funcionarios. Según la última memoria de la Mutualidad General de Funcionarios Civiles del Estado (Muface), el colectivo más numeroso es el de los maestros, con 239.000 titulares, seguido de la Policía Nacional, con 72.473.

¿El resto de funcionarios no puede optar a retirarse de forma anticipada?

Por ahora no. La nueva ley de pensiones establece en un reglamento, aún por desarrollar, la posibilidad de que cualquier trabajador público del régimen general, que iniciara su vida laboral antes del 1 de enero de 1967 y que haya acumulado 37,5 años de carrera, pueda jubilarse de forma anticipada. El funcionario que opte por esa vía tendrá un coeficiente reductor del 8% por cada año que se retire antes de cumplir 65. Es el mismo sistema que se aplica a los trabajadores del sector privado.

¿Los nuevos funcionarios también se pueden beneficiar de las ventajas de las clases pasivas?

No. Desde el 1 de enero de 2011, ningún funcionario pasa a integrarse en las clases pasivas y queda inscrito dentr o del régimen general. Esa medida, anunciada a finales de 2010 por el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, persigue poner coto a los privilegios de las clases pasivas, como las prejubilaciones o la titularidad de un seguro sanitario privado.

¿Qué aseguradoras prestan servicios a las clases pasivas?

En la actualidad tienen firmado concierto con la Administración pública Adeslas, Asisa, DKV Seguros Reunidos e Igualatorio Médico-Quirúrgico.

Lo que hacen otros países

Francia. Para cumplir con la reducción del déficit público, el Ejecutivo presidido por Nicolas Sarkozy reducirá en 30.000 personas la plantilla de funcionarios en 2012, mediante la no reposición en determinados colectivos. La mitad de las plazas que no se cubrirán corresponden al sector de la educación.

Italia. El sueldo de los empleados públicos se mantendrá congelado hasta 2013 y los que cobren más de 90.000 euros al año verán reducido su salario entre un 5% y un 10%. Al igual que en España, la tasa de reposición se ha eliminado, excepto para colectivos como policías, jueces o médicos.

Grecia. La intervención sobre Grecia ha provocado que la Administración sea sometida a una estricta dieta de adelgazamiento. Ningún contratado temporal verá renovado su contrato, la tasa de reposición se sitúa en el 10% y los salarios de los funcionarios se verán reducidos una media del 12%.



El Ibex 35 puede seguir soñando con un rally de final de año


El Ibex 35 cierra prácticamente plano en una jornada con poco volumen y de escaso interés. La confianza del consumidor en Estados Unidos permite al selectivo recuperar los 8.500 puntos y tener aspiraciones de mayores subidas.

Todavía hay opciones de rally de fin de año. Es la nota positiva que deja jornada una vez que el Ibex 35 cierra con un descenso del 0,15%. La confianza del consumidor en Estados Unidos permite al selectivo poder maquillar el 13% de caída acumulada que lleva en el año. Mañana la subasta de Italia que subastará 11.500 millones de euros será la clave para despejar la incógnita si la fortaleza de Wall Street no flaquea. Hoy la rentabilidad del bono italiano a diez años ha vuelto a superar el 7%.

A primera hora los blue chips permitían al Ibex 35 entrar en terreno positivo. Los grandes valores del selectivo se daban la vuelta borrando el primer movimiento bajista. Con la prima de riesgo estable, poco volumen, ninguna noticia inesperada y Londres cerrado por festivo; las bolsas europeas avanzaban.

La tranquilidad de los mercados se vio perturbada cuando comenzó la operativa de futuros el otro lado del Atlántico. Mientras París y Frankfurt mantenían a duras penas las ganancias, mientras el Ibex 35 entraba en pérdidas. La bolsa de Milán es la peor de la jornada con un descenso del 1% penalizada por la presión sobre la deuda italiana.

Wall Street abría a la deriva esperando la confianza del consumidor en Estados Unidos. La referencia ha sido mejor de lo previsto y alcanza el nivel más alto desde abril. Sin embargo, a los inversores estadounidense no les ha servido para marcar tendencia, pero si al Ibex 35 para recuperar los 8.500 puntos que había perdido.

El índice más importante de España se ha movido al antojo de los movimientos de Telefónica, Santander y BBVA. Al final ha recortado pérdidas que han llegado a medio punto, lo que ha permitido al selectivo cerrar prácticamente plano.

Las mayores caídas son para BME, del 2%, y para Endesa y OHL, superiores al 1%. Arcelor, Acciona y Ferrovial son lo títulos que más suben hoy.

En otros mercados, el euro avanza unas décimas frente al dólar sobre las 1,30 unidades. Los contratos de futuros del petróleo suben hasta los 108 dólares en el caso del Brent y hasta los 100 dólares en el caso del Texas.



Wall Street cierra con descenso del 0,02 % en Dow Jones Industriales


Wall Street perdió hoy impulso al final de la sesión y su principal indicador, el Dow Jones de Industriales, cerró con un descenso del 0,02 % pese a conocerse que la confianza de los consumidores de EEUU aumentó más de lo previsto en diciembre.

Ese índice, que agrupa a 30 de las mayores empresas cotizadas de EEUU, restó 2,65 puntos y cerró en 12.291,35 unidades, mientras que el selectivo S&P 500 avanzó el 0,01 % (0,1 puntos) para quedar en 1.265,43 enteros y el índice compuesto del mercado Nasdaq subió el 0,25 % (6,56 puntos) hasta 2.625,2 unidades.

Tras un arranque de jornada sin un rumbo claro, Wall Street registró tímidas ganancias hacia la media sesión y al final del día se quedó sin gas para terminar en números rojos.

En la indecisión de los inversores influyeron datos dispares sobre la economía estadounidense: mientras que la confianza de los consumidores estadounidenses subió este mes a su nivel más alto desde abril, el precio de la vivienda en las 20 mayores ciudades del país bajó el 1,2 % en octubre.

Respecto al ámbito empresarial, destacó el desplome de la cadena de tiendas Sears, que cayó el 27,2 % en el mercado Nasdaq tras anunciar que cerrará entre 100 y 120 de sus establecimientos en Estados Unidos a raíz de a una reducción de sus ventas en esta temporada de fiestas.

El lado negativo del Dow Jones de Industriales lo lideró Bank of America (-2,14 %), un día en que un tribunal de Nueva York admitió a trámite un recurso contra el acuerdo por valor de 8.500 millones de dólares para poner fin a las demandas por especular con títulos hipotecarios de alto riesgo.

Bajaron también en ese índice el banco JPMorgan Chase (-1,61 %) y el conglomerado General Electric (-1,21 %), este último tras anunciar la compra de la mayor parte del negocio de depósitos minoristas de la aseguradora MetLife (0,32 %), con 7.500 millones de dólares en depósitos en EEUU y una plataforma de banca online.

En el mercado Nasdaq, el gigante tecnológico Apple subió el 0,79 % a pesar de que la justicia italiana condenó hoy a la compañía a pagar una multa de 900.000 euros por "práctica comercial incorrecta hacia los consumidores".

En otros mercados, el crudo de Texas subió el 1,66 % y acabó en 101,34 dólares, el oro bajó hasta 1.595,5 dólares la onza, el dólar ganaba terreno ante el euro (que se cambiaba por 1,3067 dólares) y la rentabilidad de la deuda pública estadounidense a diez años bajaba al 2,01 %.



El Nikkei termina con un descenso del 0,2%


El índice Nikkei de la Bolsa de Tokio cerró hoy con una caída de 16,94 puntos, el 0,20 por ciento, y quedó en 8.423,62 enteros.El índice Topix, que agrupa a todos los valores de la primera sección, cedió 2,80 puntos, el 0,39 por ciento, hasta 721,45 enteros.

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