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martes, 18 de mayo de 2010

Prensa 18 Mayo

Trabajo ve ahora justificado imponer la reforma laboral si no hay pacto social


En julio del año pasado, entendimos que no debíamos actuar unilateralmente", explicó ayer el secretario de Estado de la Seguridad Social, Octavio Granado, sobre el fracaso del diálogo social tripartito. "Pero la situación es distinta ahora", matizó. Del mismo modo que entonces el Gobierno no se planteaba recortar el gasto social, y acaba de cruzar su gran "línea roja", en la actualidad el Ejecutivo está dispuesto a imponer una reforma laboral sin el consenso de sindicatos y patronal. No en vano, son las mismas voces, los mercados y la Unión Europea, quienes vienen reclamando ambas actuaciones.

 
"En esta ocasión entendemos que el Ejecutivo debe actuar", declaró Granado en un almuerzo organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE). Pese a todo, el número dos de Trabajo manifestó su convicción de que "habrá acuerdo" antes de final de mes, y de que "los agentes sociales son conscientes de que no deben obstaculizar el proceso".

 
Una postura que ha sido asumida por el propio presidente de la patronal, Gerardo Díaz Ferrán, que ha defendido una reforma por decreto ley, en caso de que no haya consenso. Más difícil será que comulgue la CEOE con la tajante negativa que dio ayer Granado a una de sus peticiones fundamentales. "No hay margen para reducir cotizaciones sociales", aseveró, teniendo en cuenta que el año que viene se congelarán las pensiones.

 
Y aunque esta postura coincide con la que han defendido los sindicatos, la indignación que les ha producido el drástico recorte del gasto social dificulta también un acuerdo por esa parte. Las centrales denuncian que la reducción de fondos podría dejar sin soporte financiero a algunas de las medidas recogidas en la reforma. Es el caso de las bonificaciones al empleo de jóvenes o a la aplicación de reducciones de jornada (el modelo alemán).

 
"La reforma laboral partía de la financiación marcada en los presupuestos, que no se va a ver ajustada", les respondió el responsable de la Seguridad Social. El problema es que de los 2.800 millones de euros dedicados a la bonificación de contratos, sólo 190 millones están dispuesto para ser reasignados inmediatamente. Y no habrá aportaciones adicionales.

 
Convocatoria a la negociación

 
En cualquier caso, tras un intenso proceso de negociación bilateral con los empresarios, CC OO y UGT han urgido al ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, a retomar la negociación tripartita para ser informados del efecto que tendrá el plan de ajuste en la reforma laboral.

 
"Lógicamente estas medidas crean una cierta dificultad en el diálogo social, pero valoro muy positivamente que no hayan roto el diálogo", admitió por su parte el ministro. Sin embargo, añadió que el plan de ajuste "quedaría incompleto" si no se acomete la reforma laboral. Corbacho, de visita a Lérida, instó a sellar un pacto antes de final de mes, porque "no se puede esperar más tiempo", informa Europa Press.



Zapatero desata la confusión sobre las pensiones


El Gobierno no incluirá la «congelación» de pensiones en el decreto-ley que aprobará el jueves, para garantizarse así el apoyo de CiU y PNV. El texto sólo contempla la rebaja en el sueldo de los funcionarios, y los recortes en inversión pública (4.000 millones) y ayuda al desarrollo (600 millones), medidas que obligan a reformar la Ley de Presupuestos 2010. Al margen de la jugada política, el Ejecutivo sostiene que no es necesaria ninguna reforma legal sobre pensiones contributivas. Argumenta que ya subieron un 2% en 2009 (hasta el 4% las mínimas), mientras que el IPC lo hizo en un 0,8%, con lo que la ganancia de poder adquisitivo de los pensionistas fue del 1,2% el año pasado. Este año han subido lo pactado, un 1%. El problema para el Gobierno surgirá en noviembre si el IPC interanual es superior a ese punto. Entonces, se pondrá en marcha una cláusula automática de revisión. Zapatero desató la confusión ayer por la tarde cuando confirmó que a finales de este año se aprobará una revalorización de todas las pensiones si ese IPC interanual es superior al 1 por ciento. Muchos lo entendieron como una subida de hecho de las pensiones en 2011, lo que contradecía el mensaje de ajuste anunciado por él mismo el pasado miércoles en el Congreso.

 
En la oposición, la mayoría de los grupos han dejado claro que no apoyarán ningún decreto-ley que incluya la congelación de las pensiones el próximo año.


 
El 40% del IRPF se obtiene de las rentas de más de 60.000 euros


El Ejecutivo sigue buscando la manera de cuadrar gastos e ingresos para equilibrar unas cuentas que se han desbocado en el último ejercicio. En 2009, los ingresos cayeron un 13,9% y los gastos subieron un 27,8%, lo que acabó ofreciendo un déficit del 11,2% del PIB. Un saldo muy alejado del 3% marcado en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento, que ha obligado al Ejecutivo a presentar un programa de ajuste del gasto combinado con subidas de impuestos para alcanzar ese objetivo en 2013.

 
Para tapar ese agujero decidió en primer término eliminar este año la deducción de 400 euros en el IRPF, que le supondrá un ahorro de 6.000 millones de euros, elevar la tributación de las rentas de ahorro del 18% al 20%, que le reportará 900 millones, e incrementar en dos puntos el tipo general del IVA (del 16% al 18%) lo que le permitirá ingresar 5.000 millones más este año. Tres decisiones que afectan en gran medida a los tramos medios de renta y que apenas impactan en los tramos altos, lo que le ha obligado a algunos miembros del Ejecutivo a anunciar, como una medida de equidad, que se está estudiando una subida de impuestos para aquellos que más ganan.

 
Pero, ¿será efectiva está subida para lograr el objetivo de generar más ingresos? Un primer análisis de la recaudación del IRPF apunta a que una subida en los tramos de renta más altos tendrá un impacto limitado en la recaudación. De las cerca de 18 millones de declaraciones de IRPF que se presentaron en 2006 con los ingresos de 2007 (último dato disponible), apenas 800.000 reconocen tener unos ingresos superiores a 60.000 euros, lo que supone apenas un 4% del total.

 
Ese es el tramo de rentas que se vería gravado con un mayor tipo marginal (aquellas rentas que superen los 53.407 euros tienen un 43%). Según los cálculos realizados por este periódico, por cada punto que se subiera ese tipo máximo se lograría una recaudación adicional de 562 millones de euros, así que un incremento de siete puntos, tal y como habían propuestos algunos grupos parlamentarios, supondría una inyección de 4.000 millones de euros.

 
De los 61.241 millones de euros que recaudó Hacienda por el IRPF, una vez descontadas las deducciones, cerca del 40% (24.446 millones) procedió de los contribuyentes que declararon unos ingresos superiores a 60.000 euros, mientras que ese porcentaje se eleva al 60% (36.795 millones) para aquellas rentas inferiores a los 60.000 euros anuales. Especialmente significativa es la aportación de las rentas situadas entre los 30.000 y los 60.000 euros, que representan el 15% de las declaraciones y el 30% de los ingresos. Es decir que el grueso de la recaudación por IRPF está soportado por las rentas medias. En este escenario, el director general de Funcas, Victorio Valle, se muestra partidario de un incremento del IRPF en todos los tramos, ya que, a su juicio, "el impacto recaudatorio que se obtiene subiendo en exclusiva el tipo máximo no es significativo".

 
¿Qué otras alternativas, fuera del IRPF, le quedan al Ejecutivo para generar más ingresos? Una podría ser elevar la tributación de las Sociedades de Inversión de Capital Variable (Sicav), cuyos beneficios tributan al 1% en el impuestos de sociedades, en tanto que las plusvalías retiradas por los partícipes lo hacen al 18%. El Ejecutivo ya estudió una medida parecida a mediados del año pasado y se encontró con la amenaza por parte de estas compañías (hay censadas 3.300 en España y gestionan un patrimonio cercano a los 25.000 millones) de fuga de capitales si se producía un aumento de la presión fiscal.

 
Otros instrumentos que podría utilizar el Ejecutivo para combinar los dos objetivos (generar más ingresos y gravar a las rentas más altas) podría ser la recuperación del impuesto de Patrimonio, eliminado desde 2008 y a través del cual se ingresaron 1.800 millones de euros en el último año de recaudación, o el incremento del impuesto de Sucesiones, estableciendo un tipo mínimo, tal y como ha planteado recientemente el Instituto de Estudios Fiscales, dependiente del Ministerio de Economía.



Caixa Catalunya, Caixa Tarragona y Caixa Manresa aprueban su fusión

 
Las asambleas de Caixa Catalunya, Caixa Tarragona y y Caixa Manresa han aprobado el proceso de fusión entre las tres entidades.

 
Las tres cajas catalanas protagonizan así la primera gran fusión aprobada por el Banco de España y la Comisión Europea. La nueva entidad contará con 81.000 millones de euros de activos totales y será la cuarta caja de ahorros en el ránquing de nuestro país.

 
Adolf Todó asume la Dirección General de la nueva entidad. La configuración del equipo directivo se ha realizado siguiendo criterios estrictos de capacidad profesional, la decisión ha sido siempre "el mejor en cada puesto" huyendo de personalismos y de repartos por cuotas.

 
La Obra Social, como manifestación más visible del compromiso de la nueva entidad con la sociedad, mantendrá una fuerte vinculación con el territorio y los programas orientados a los colectivos desfavorecidos.


 
Nace Unnim, la caja de la Catalunya central


También quedó cerrado ayer definitivamente el segundo proceso de fusión de cajas catalanas, las llamadas comarcales o centrales: Terrassa, Sabadell y Manlleu, que operarán bajo el nombre de Unnim. Caixa Girona, que inicialmente era candidata a la integración de las cajas públicas y que después se sumó a las comarcales, terminó por descolgarse del proyecto. Las asambleas de las tres entidades que continúan ratificaron el acuerdo.


Los gestores de la nueva entidad han solicitado al FROB la mínima cantidad posible, 380 millones, a devolver en el plazo de cinco años. Con esos recursos se financiará el plan de reestructuración del nuevo grupo financiero, que se desprenderá de 145 oficinas y reducirá su plantilla en unos 500 empleados. Los comités de empresa y las tres cajas han pactado la forma de recortar la nómina, en la mayor parte de los casos a través de prejubilaciones.

El director general de Unnim será Enric Mata, actual director general de Caixa Terrassa, mientras que Salvador Soley, presidente de Caixa Sabadell, ocupará la presidencia de la entidad .

 
Una vez han empezado a andar las dos sociedades, el número de cajas en Catalunya pasa de 10 a 6. Al margen de La Caixa, quedarán tres solteras: Caixa Penedès, Caixa Laietana y Caixa Girona. Tanto el Banco de España como la Generalitat siguen con interés las negociaciones que también les deberían conducir en breve a un proceso de concentración.



El Eurogrupo defiende a la moneda única frente a los embates de los mercados


El presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, defendió la "credibilidad" del euro, tras reunirse con los ministros de Finanzas de la "eurozona" para discutir los detalles del plan blindaje de la moneda única y horas después de que tocara mínimos de hace cuatro años respecto al dólar.

 
"El euro es una divisa creíble. La estabilidad de precios se ha mantenido por completo y será mantenida en el futuro. Ésta es la característica más importante del euro y su gran baza de cara a los inversores", dijo Juncker. El también primer ministro de Luxemburgo hizo esas declaraciones tras una reunión de más de siete horas en la que los ministros no lograron cerrar los detalles del acuerdo sobre el mecanismo destinado a salvaguardar la estabilidad de la región, dotado con hasta 750.000 millones de euros. Los titulares de Finanzas volverán a tratar el tema este viernes en Bruselas, para ultimar los detalles de su aportación al fondo de rescate, consistente en 440.000 millones de euros que movilizarán gracias a garantías bilaterales de los países de la eurozona.

 
Ayudas de hasta 250.000 millones

 
El mecanismo acordado el 9 de mayo pasado también contempla ayudas por valor de hasta 60.000 millones de la Comisión Europea, a lo que hay que sumar la aportación del Fondo Monetario Internacional, de hasta 250.000 millones. Juncker anunció asimismo que Grecia recibirá el primer tramo del plan de rescate pactado por los países de la zona euro y el FMI, que asciende a 20.000 millones de euros, de un total de 110.000 millones de euros para los próximos tres años.

 
Mayor coordinación

 
Por otro lado, Rehn presentó ante los titulares de Finanzas sus propuestas para incrementar la coordinación de las políticas económicas en la zona euro, con objeto de acortar los desequilibrios que han llevado a la actual crisis. Ni Juncker ni Rehn quisieron extenderse en este capítulo, que dijeron que será debatido en las próximas semanas, pero Juncker dijo haber constatado un amplio apoyo entre los Dieciséis a la propuesta de la Comisión de evaluar los presupuestos nacionales antes de que sean votados por los parlamentos de los estados miembros. "Pensamos que las propuestas de la Comisión van en la buena dirección. Es importante que los diputados puedan tomar las decisiones conociendo los comentarios que los otros países de la zona euro hayan podido hacer", dijo Juncker.



El Ibex 35 cierra la sesión con una caída del 0,31% y baja hasta los 9.200 puntos


El parqué madrileño cerró hoy una sesión radicalmente distinta a la que marcó el pasado lunes, cuando se anotó la mayor subida de su historia, al sumar su tercer tercer día consecutivo de descensos (-0,31%), que situó al selectivo en la cota de los 9.286,1 puntos.

 
La sesión de hoy estuvo marcada de nuevo por una gran volatilidad y el Ibex se paseó con rapidez entre las pérdidas y las ganancias durante las primeras horas de la jornada. A mediodía, el Ibex logró afianzar las subidas y se situó por encima del 1%, hasta que el tono negativo de Wall Street volvió a sembrar las dudas entre las inversores y el Ibex regresó al terreno de los descensos.

 
Con la caída de hoy, el Ibex eleva el recorte semanal (en relación al pasado lunes) hasta el 10,21%. La incertidumbre y el miedo sobre la situación económica impiden al selectivo despegar y se aleja cada vez más de los 10.000 puntos.

 
No obstante, la subida de Telefónica (+1,51%), Repsol YPF (+0,49%) e Iberdrola (+0,28%) logró contrarrestar las caídas de la banca y a aminorar el descenso. En concreto, Banco Popular perdió un 2,70%, seguido BBVA (-1,78%), Banesto (-1,73%), Bankinter (-1,62%), Banco Sabadell (-1,11%) y Banco Santander (-0,94%).

 
El resto de las principales subidas correspondieron a Gas Natural (+1,58%), Inditex (+0,46%) y Acciona (+0,42%), mientras que en el lado de los descensos también se situaron Indra (-4,21%), Mapfre (-4,14%), Abengoa (-2,29%) y ArcelorMittal (-2,05%).

 
En Europa, los principales indicadores mostraron un comportamiento dispar, ya que París cedió un 0,47% y Londres, un 0,01%, mientras que Franfort subió un 0,17%.

 
En el mercado de divisas, el euro logró recuperar posiciones frente al dólar al cierre de la sesión de hoy y situó su cambio en 1,2330 unidades. No obstante, la moneda común europea se hundió al comienzo de la sesión en niveles mínimos de hace cuatro años al llegar a intercambiarse por 1,2237 unidades.



Los movimientos corporativos, insuficientes para devolver las alzas a Wall Street


Wall Street oscila entre los números rojos y las alzas, aunque poco a poco comienzan a imponerse los descensos por quinto día consecutivo. Los anuncios de movimientos corporativos son insuficientes para dar un respiro a unos inversores que aún miran con preocupación la evolución de la crisis de las deudas soberanas europeas, que amenaza con frenar en seco la recuperación económica mundial. La desaceleración de la actividad manufacturera en mayo impide también el despegue del mercado.

 
El Dow Jones baja un 0,21% en la apertura hasta los 10.597,28 puntos, mientras que el S&P 500 baja un 0,12% hasta los 1.134,35 enteros. El Nasdaq Composite baja un 0,11% hasta 2.344 puntos.

 
En el apartado macroeconómico, los inversores han conocido ya antes de la apertura el índice de actividad manufacturera del Empire Estate de Nueva York, que se ha situado en 19,1 puntos en mayo, desde los 31,9 puntos de abril, que representaban la segunda cota más alta en cuatro años.

 
El precio del petróleo vuelve a bajar en la jornada de hoy ante la subida del dólar frente al euro en el mercado de divisas. El precio del oro negro retrocede un 0,58% hasta situarse en 74,90 dólares el barril. Exxon Mobil, la mayor petrolera de EEUU, cede un 0,03% en la apertura de sesión.

 
Los movimientos corporativos no logran reactivar al parqué neoyorquino. GLG Partners se dispara un 49.48% en la apertura de la sesión después de que la firma británica Man Group haya anunciado que pagará 1.600 millones de dólares por hacerse con ella.

 
Pactiv Corporation se anota una revalorización del 20,82% en los primeros compases de la negociación tras conocerse que Apollo Global Management está en negociaciones para hacerse con la firma.

 
En el sector de la salud, los movimientos corporativos vienen de la mano de Universal Health Services, que ha llegado a un acuerdo para adquirir Psychiatric Solutions por un aprecio de unos 2.000 millones de dólares. En concreto, pagará 33,75 dólares por acción de la compañía, y asumirá 1.100 millones en deuda neta. Las acciones de Psichiatric bajan un 0,49%, mientras que las de Universal Health suben un 8,32%.

 
Los inversores han conocido también hoy que General Motors ganó 865 millones de dólares en el primer trimestre del año, su primer beneficio desde 2007, en los inicios de la crisis.

 
Lowes baja un 5,33% en los primeros compases de la negociación tras decepcionar al mercado con sus perspectivas de ganancias futuras. Para el segundo trimestre del año la minorista de mejoras para el hogar espera unas ganancias de entre 57 y 59 centavos por acción, por debajo de los 62 centavos augurados por los analistas. Para el conjunto del año, que la propia compañía ha calificado de transición, espera un beneficio de entre 1,37 y 1,47 dólares por acción, en línea con las perspectivas del mercado.







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